LA PRIMERA FLOR

Hoy me levante con una gran sorpresa. La primera flor de mi ventana la dió la portuaria, es de color naranja y de corola doble, y lo mejor es que tiene mas botones de flor para madurar, se ha adaptado genial y eso que vino de esqueje y no de semilla.

La portuaria ("portulaca grandiflora") es originaria de Brasil y Argentina. Le gusta el pleno sol y el verano, es anual y tiene abundante floración en verano, no le gusta el riego abundante, solo cuando este la arena seca. Se muere con los primeros fríos, por lo que hay que coger las semillas para el siguiente año.

A la ventana no hacen más que llegar nuevos habitantes,  las últimas dos esquejes de crisantemos y un bulbo de amarilis, que es joven, asi que es probable que o lo vea florecer en mucho tiempo, y el pleno sol no se como le irá, pero me arriesgaré, espero que tenga suerte.

UNA SEMANA DESPUÉS

Poco a poco la ventana va cogiendo de nuevo forma, parece que las portuarias se han habituado pronto a su nuevo espacio, los geranios andan en ello, pero están algo tímidos todavía, cual será el primero en dar flor...

El tiempo irá moldeando poco a poco el espacio entre las plantas y hasta que tomen forma y se sientan las plantas tan bien como antes.

De momento en una semana ya voy viendo los avances, se van adaptando bien y hasta Momo ha encontrado su sitio especial.

INICIOS

Javiruli veía salir pequeñas raíces de algunos de los esquejes que había traído de lejos para su ventana, lo que le emocionó tanto que no pudo esperar más en plantarlos para verlos cuanto antes lucir en su ventana.

Cogió algunas macetas y tierra para plantas, y comenzó a separar los esquejes enraizados.

 Se trataba de portuarias de varios colores, verdeolagas color rosado y una gitanilla rosa. Parece que el color que en inicio predominara sera el rosado cuando empiecen a florecer. Poco a poco con arreglos diarios, y más plantaciones irá tomando nuevos colores, y ya poniend macetas más decorativas el resutado sería genial.

Pensó en la canidad de esquejes que tenía por enraizar en su mayoría geránios de distintos tipos, y se dijo: "Tiempo al tiempo, com paciencia y mimo, recordaras lo agradecidas que son las plantas"; y terminó regándolas con agua fresquita.

EL REGRESO

Había una vez, en una ciudad dónde el sol quema en verano y el frío hiela en invierno, una ventana que lucía preciosa todo el año. Daba igual la estación en la que estuviera, pues siempre estaba llena de colores, y orientada al sur, el sol acariciaba sus flores durante todo el día.

Pero un día los ojos que la miraban y cuidaban se marcharon de ciudad, y la ventana entristeció viendo pasar el verano que quemó sus colores, el otoño la desnudaron de hojas, y el invierno hizo que durmiera en el olvido y ya no volvió a brotar.

Seca pasó las estaciones, hasta que un día caluroso de Julio, los ojos que la miraba y cuidaba regresó, y subió la persiana despertando por fin a la ventana de su largo letargo.

DESPIERTA